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Futbolero
17 de noviembre de 2017 09:46

William Araujo, de libertadores a rey en la segunda

También anduvo por la Tri: aquí junto a Quiñónez, Calle, George y ‘Pato’ Urrutia. Foto: Alfredo Lagla / ÚN

También anduvo por la Tri: aquí junto a Quiñónez, Calle, George y ‘Pato’ Urrutia. Foto: Alfredo Lagla / ÚN

Mauricio Bayas

Cuando Héctor González, el técnico de Puerto Quito, puso el nombre de William Araujo sobre la mesa, los directivos del cuadro de ascenso miraron al ‘Pipa’ extrañados.

El DT lo pidió como refuerzo para jugar el torneo de la Segunda Categoría. La dirigencia accedió y ‘Willy’, al llegar al cantón del noroccidente, fue recibido con bombos y platillos .

Cuatro meses después, Araujo es el líder del cuadro que pelea por uno de los dos cupos a la Serie B del 2018. Es el más respetado y el capitán de una tropa de pelados no mayores de 22 años.

El futbolista quiteño pasó de estar en los cuatro títulos internacionales de Liga de Quito a recibir ‘hacha’ en los partidos de Segunda.

“Siempre les digo a los chicos que hay que luchar por sus sueños. Ha sido difícil venir de Primera. Tienen razón cuando dicen que en la Segunda golpean más. No se miden. Con una lesión pueden acabar la carrera de uno”, cuenta con voz bajita.

A sus 38 años hay rivales que le admiran y le piden consejos. Igual lo hacen sus compañeros. Es el ‘director de orquesta’ dentro de la cancha en el campeonato.

Wilder Valencia, el presidente del equipo, recuerda la anécdota y las dudas que hubo al momento de su vincu­lación. Pero ahora está feliz por el rendimiento. “Es un guía para los muchachos. Ha tomado la batuta en iniciativas como vender boletos para conseguir recursos. La gente en Puerto Quito lo identifica y lo quiere mucho por su responsabilidad”.

Araujo tiene las medallas, fotos y recuerdos de los títulos con Liga en Quito. En la capital vive su familia y cada vez que puede se viene para la capital. Cuenta que chatea por celular con sus excompañeros de Liga de Quito. También lo hacía con el DT Edgardo Bauza. El ‘Patón’ siempre estaba pendiente de su carrera y de su familia.

Hasta el 2013 mantenían un grupo con sus amigos. “Los títulos internacionales son momentos que quedarán marcados en el corazón de uno. Cuando entro a mi casa y veo los trofeos, uno se emociona por todo lo que se vivió en su momento”.

Araujo es uno de los que recibe un salario gracias a la colaboración de un empresario ganadero. Redondea el sueldo con lo que se recauda en las taquillas cuando juegan de locales.

Su sueño es dar la vuelta olímpica y aparecer como protagonista en la llegada de fútbol profesional a Puerto Quito, este año.